TEMA8 LA CULMINACION DEL PROCESO
March 29, 2024

SERIE LA PASCUA – El Proceso
TEMA8 LA CULMINACIÓN DEL PROCESO
Marcos 16:1-8
PASTOR ADOLFO FLORES
Domingo 31 de Marzo, 2024

Introducción:
El título del mensaje es La Culminación del Proceso.

Antes de leer la Escritura, demos un repaso para tener una idea de lo que hemos visto.
Hemos estado leyendo el Evangelio de Marcos por siete semanas y esta mañana, llegamos a la culminación del proceso—La Causa por la que Jesús experimento todo este sufrimiento.

Marcos 16:1-8 LBLA “Pasado el día de reposo, María Magdalena, María, la madre de Jacobo, y Salomé, compraron especias aromáticas para ir a ungirle. 2 Y muy de mañana, el primer día de la semana, llegaron al sepulcro cuando el sol ya había salido.
3 Y se decían unas a otras: ¿Quién nos removerá la piedra de la entrada del sepulcro? 4 Cuando levantaron los ojos, vieron que la piedra, aunque era sumamente grande, había sido removida. 5 Y entrando en el sepulcro, vieron a un joven sentado al lado derecho, vestido con ropaje blanco; y ellas se asustaron.
6 Pero él les dijo: No os asustéis; buscáis a Jesús nazareno, el crucificado. Ha resucitado, no está aquí; mirad el lugar donde le pusieron. 7 Pero id, decid a sus discípulos y a Pedro: «Él va delante de vosotros a Galilea; allí le veréis, tal como os dijo». 8 Y saliendo ellas, huyeron del sepulcro, porque un gran temblor y espanto se había apoderado de ellas; y no dijeron nada a nadie porque tenían miedo.”
En la Historia de la humanidad ha habido muchos momentos oscuros.
El Domingo se convertiría en un día de resurrección y nueva vida.
Precisamente una semana antes (Domingo de ramos), Jesús entro a Jerusalén sentado en un pollino, las multitudes se colocaban en las calles ese día gritando ¡Hosanna! ¡Hosanna! El hijo de David, bendito el que viene en el nombre del Señor; ¡Hosanna en lo más alto!

Commt. “El Señor ahora estaba totalmente rodeado por una masa humana, quizás de varios cientos de miles de personas, algunas de las cuales iban delante de Él y otras iban detrás.”

El jueves al atardecer, Jesús con sus discípulos se dirigen al aposento alto a celebrar la Pascua. Ahí, Jesús cambio para siempre a lo que ahora conocemos y celebramos como la Santa Cena o la Cena del Señor.
Ahí tomo el pan lo bendijo y lo partió diciendo: “Este es mi cuerpo que es entregado por ustedes; hagan esto en memoria de mí.” Luego tomo la copa y dijo: “esta copa es el nuevo pacto en mi sangre que por ustedes es derramada.”

A partir de aquí, daba comienzo el doloroso martirio para Jesús.

¿Por qué los discípulos abandonaron a Jesús? ¿Por qué en los momentos difíciles no pudieron mantenerse, por el contrario, huyeron aterrados? ¡Porque eran humanos, frágiles, simples!

Después, Jesús es llevado con Caifás para enjuiciarlo. El sumo sacerdote le pregunta directamente: “¿Eres Tú el Mesías?” y Jesús dice “¡Yo Soy!”

Más adelante, lo llevan con Pilato, pero sucede algo interesante—contradictorio aquí.
Presionado por la multitud y queriendo prevenir un tumulto, da la orden para que flageen a Jesús. Después del castigo, Pilato le dice a la gente: ¡He aquí, al hombre! Y la gente le grita a Pilato, ¡crucifícalo!

Solo habían pasado 4 días donde clamaban y decían: ¡Sálvanos! ¡Sálvanos! Y ahora la multitud gritaba con odio: ¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!
Pregunto: ¿Dónde estaba toda esa gente que Jesús sano? Los ciegos, leprosos, mancos, cojos, paralíticos. ¿Dónde está toda esa gente que fue sanada? ¿Dónde están los que juraron lealtad?
¿Dónde están en el momento que la gente está gritando crucifíquenlo?

Pilato agrada a la gente y entrega a Jesús para que sea crucificado.

VIERNES, EL DÍA DE LA CULMINACIÓN DEL PROCESO PARA DAR PASO A UN NUEVO COMIENZO EN DOMINGO.

Unas pocas horas más tarde (todavía era temprano en la mañana), comienza la vía dolorosa—el camino del sufrimiento. Aquí, Jesús es obligado a llevar su cruz por las calles de Jerusalén. Llegan al lugar llamado Gólgota—Calavera; latín: Calvaria, donde será crucificado

Ahí Jesús, fue desnudado para ser ejecutado. La multitud lo miraba y se burlaban de Él, pero Jesús no decía nada; solo en un momento se le oyó a Jesús decir: “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen.”

NOTA: AUN ESTANDO EN SU AGONÍA, JESÚS ESTABA PENSANDO EN LAS PERSONAS. JESÚS ESTABA PENSANDO EN TI Y EN MI CUANDO DIJO: ¡Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen!

Un soldado escucho esto y dijo: “ciertamente, este hombre es Hijo de Dios.”

A las tres de la tarde; es la hora cuando en el templo se hace el sacrificio y el shofar resuena a través del valle, en ese momento exacto, Jesús dijo: “Padre, en Tus manos encomiendo mi espíritu.” Y Jesús murió como el sacrificio final por el pecado.

Jesús muere, y su cuerpo es bajado de la cruz con cuidado y lo envuelven en una sábana pero con rapidez (porque se acercaba el día de reposo y era contra la ley preparar un cuerpo para enterrarlo.

NOTA: Pilato había escuchado rumores de que Jesús iba a resucitar al tercer día y temía que alguien se robara el cuerpo o que convirtieran a Jesús en un mártir y envió a un centurión—cien soldados, para que cuidaran la tumba de Jesús.

Llega el Sábado, no había fiesta ni cantos al contrario, había tristeza, llanto; pero este llanto era de haber perdido la esperanza de ser liberados de la opresión romana.
Se acaba el sábado y llega el Domingo. Temprano en la mañana, unas mujeres llegan a la tumba para preparar el cuerpo del Señor y se dan cuenta que la piedra fue removida.

La guardia se había ido y las mujeres entraron en la tumba y vieron que estaba vacía, solo un ángel estaba sentado a la derecha y les hablo:
Mateo 28:5-6 NVI “5 El ángel dijo a las mujeres: No tengan miedo; sé que ustedes buscan a Jesús, el que fue crucificado. 6 No está aquí, pues ha resucitado, tal como dijo. Vengan a ver el lugar donde lo pusieron.”

¡El fin del proceso culmino, ahora es un nuevo día! Jesús no está muerto, Él está vivo.

PUNTO: Todos nosotros entendemos que la piedra fue removida para que Jesús pudiera salir; en realidad, la piedra fue removida para que nosotros pudiéramos entrar y ver que la tumba está vacía.

En esta mañana estamos reunidos en nombre del que estaba muerto pero que ahora está vivo.

¡Cristo resucito! ¡Él vive!